La limitante principal de las ventanas de PVC, hace algunos años atrás, era que solo se encontraban en el color blanco como base que caracteriza a este tipo de ventanas.
La acelerada inversión e innovación de los últimos años en la industria, ha provocado que actualmente las ventanas PVC se encuentren en una amplia variedad de colores planos e incluso en imitaciones de distintas maderas y metales, con acabados y textura diferente al monótono blanco liso.
Gracias a esta variación a los beneficios de las ventanas PVC se le suma, la capacidad de adaptarse a más estilos, además de complacer a todas las exigencias. Ahora representan una estética más natural y atractiva simulando la madera en todas sus variaciones.
¿Cómo son las ventanas PVC imitación madera?
Las ventanas de PVC imitación madera se logran a partir de una técnica de acabado comida como foliado. Gracias a esta técnica el estilo de las ventanas replica la estética de diferentes tipos de madera que les da un toque de rústicas.
La técnica de foliado consiste en adherir un folio o película de color al perfil del material, en este caso el PVC. La técnica logra cambiar el aspecto del perfil, pero además potencia sus prestaciones.
Y es que, actúa como una capa protectora ante agentes externos, como la humedad, radiación solar, la corrosión y variaciones de la temperatura. Es esencial asegurar la estabilidad y durabilidad del acabado para alargar la vida útil de la ventana PVC.
Imitación madera o de madera natural ¿Qué es mejor?
Antes de decidir que es mejor para tu casa entre las ventanas de PVC o las de madera natural, fíjate en los beneficios que te ofrece la opción que imita el aspecto de la materia prima.
Ciertamente la madera es un excelente aislante natural y las ventanas de madera son atractivas estéticamente hablando, de hecho, pueden ser obras de arte de artesanía muy apreciadas por los amantes del estilo, pero tiene desventajas como material.
Como tienen tanta demanda su coste es mucho mayor y hablamos del precio, aunque hay empresas como ventanasmadera.es que suelen tener una buena calidad-precio.
Este material tan apreciado por sus cualidades y estética absorbe la humedad, dañando su estructura, es decir se hincha y pierde su forma, se agrieta y su belleza natural desaparece.
Además, sus propiedades de aislamiento térmico y acústico se pierden por efecto de los cambios climáticos cuando el material se expone a estos.
Con una ventana de PVC con imitación madera no tendrás estos inconvenientes. Recuerda que el PVC es una resina reciclable, que se compone de sal común con un porcentaje superior al 50%.
Entre los beneficios que más resaltan del PVC tenemos que, es aislante y eficiente, su coste es bastante más inferior, de hecho, puede llegar a costar la mitad que una ventana de madera natural.
El coste por mantenimiento también es más bajo y se hace de forma correcta extiendes la vida útil del material. Cabe destacar que con un poco de agua y jabón el PVC queda listo.
A diferencia de la madera, el PVC es inmune a la contaminación y resisten mucho mejor las inclemencias y variaciones del clima.
Aplicaciones: ¿Dónde quedan bien las ventanas de PVC imitación madera?
Tienen tantas aplicaciones como puedas imaginar, de hecho, una de las razones por la que tienen tanta demanda las ventanas de PVC imitación madera y su amplia gama de aplicaciones para estilos diferentes.
El aspecto natural de la madera encaja a la perfección en los estilos más rústicos rurales y tradicionales. Quedan perfectas también en elementos más contemporáneos, por ejemplo, en grandes ventanales deslizantes.
El PVC no se limita a las ventanas, también el folio en madera se utiliza en puertas, las tradicionales y las más modernas y estilizadas.
En fin, las múltiples cualidades de las ventanas PCV con imitación madera, los beneficios que tienen frente a los elementos que se fabrican a partir de la materia prima y sus aplicaciones, son algunas de las razones de la alta demanda que tienen en la actualidad.